Las recientes reformas a las pensiones en México tendrán efectos significativos en las futuras jubilaciones, variando considerablemente entre generaciones, según Claudia Castro, directora de Retiro de WTW. Se destacan dos reformas principales: la del 2024, que fija un nuevo beneficio mínimo de jubilación igual al último salario para los trabajadores próximos a jubilarse por vejez, y la del 2020, efectiva en 2023, que eleva gradualmente las contribuciones a las Afores del 6.5% al 15% del salario cotizado en el IMSS.
Estos cambios delinean distintos escenarios de retiro según la edad de los trabajadores: quienes tengan más de 45 años bajo la Ley del 73 podrán jubilarse con un 70 a 80% de su último salario si acumulan 30 semanas de cotización, aunque este porcentaje podría alcanzar el 100% si se jubilan a los 65 años. Los trabajadores de 20 a 45 años ya no se benefician de la Ley del 73, y su pensión representará entre el 30 y 35% de su último salario, mientras que los menores de 20 años, gracias a las reformas, podrían aspirar a una jubilación que represente entre el 45 y 50% de su último salario.
Castro advierte sobre la vulnerabilidad de futuras jubilaciones debido a la baja cobertura de la seguridad social y recomienda la planificación anticipada utilizando planes privados de jubilación y ahorro voluntario para optimizar los beneficios, incluyendo ventajas fiscales. Sugiere que la inversión en fondos dedicados a la jubilación puede ofrecer importantes beneficios tributarios, enfatizando la importancia del ahorro inteligente y estratégico para mejorar los rendimientos del retiro.